13. Almacenamiento de peces vivos

​

13.0. Introducción

 

1. En una granja, a veces es preciso mantener a los peces vivos durante varios días fuera de las instalaciones normales de cría, por ejemplo:

 

• en el caso de mantenimiento o traslado de peces juveniles, mientras se espera que el estanque de engorde esté listo;

• cuando se cosechan peces destinados a ser vendidos vivos, ya sea para establecer poblaciones o para su consumo alimenticio (véase Sección 14.0);

• durante el período de reproducción, cuando se seleccionan reproductores maduros;

• para impedir o curar enfermedades aplicando un tratamiento químico (véase Sección 15.3);

• para mejorar la calidad de los peces, por ejemplo reduciendo sabores desagradables.

 

Almacenamiento de peces vivos

​

2. Las instalaciones de almacenamiento se diseñan expresamente para mantener peces provisionalmente; para reducir los costos se usan altas densidades de almacenamiento; el período de almacenamiento normalmente no excede una semana. Debido a que los peces se almacenan con una alta densidad, es preferible no alimentarlos, para reducir el consumo de oxígeno disuelto y la contaminación del agua.

 

3. Para lograr mantener en vida los peces, se debe organizar cuidadosamente el almacenamiento.

 

(a) Se requiere un abundante suministro de agua bien oxigenada. De ser necesario, se debe utilizar aireación para mantener la buena calidad del agua.

(b) El transporte de los peces debe ser rápido; se elige un punto de almacenamiento cerca de los lugares de cosecha y se asegura que resulte accesible a los medios de transporte seleccionados.

(c) Se debe simplificar la cosecha y la manipulación tanto como sea posible, a fin de reducir la posibilidad de que los peces sufran estrés y otros daños.

(d) Los peces almacenados se deben proteger cuidadosamente, contra la acción de predadores y ladrones, por ejemplo mediante la construcción de rejas (véase Sección 4.5) y con dispositivos especiales contra la depredación por parte de aves (véase Sección 4.8).

(e) La tasa de población almacenada debe ser adoptada en función de las condiciones existentes en las instalaciones: temperatura del agua, disponibilidad de oxígeno disuelto, tasa de intercambio de agua, duración del período de almacenamiento y tipo de pez. En las mejores condiciones de agua fresca y bien oxigenada, durante un corto período de tiempo, se podrá almacenar:

 

• hasta 140 kg/m³ si los peces se encuentran en buen estado de salud, son resistentes y el intercambio de agua es alto, por ejemplo en un recinto cerrado con una red;

• hasta 90 kg/m³ si los peces se encuentran en buenas condiciones y hay un intercambio moderado de agua o el agua está bien aireada;

• hasta 50 kg/m³ si el intercambio de agua es limitado como, por ejemplo, en un depósito o estanque de almacenamiento, o si los peces son más sensibles.

 

4. En los recintos de red o jaulas el agua se renueva como consecuencia de las corrientes locales o del movimiento de los propios peces. Se debe verificar, en ese caso, que los peces se encuentren razonablemente activos, que las redes estén limpias y que permitan el intercambio de agua y que la calidad externa del agua sea buena.

 

5. A modo de guía aproximada, en depósitos o estanques se requiere un caudal de agua de:

 

• 0.5 I/min/kg de peces para los peces más sensibles;

• 0.2 I/min/kg con buena aireación para peces sensibles;

• 0.2 I/min/kg con aireación moderada para peces resistentes;

• 0.1 I/min/kg o menos con buena aireación para peces resistentes.